"Se habla excesivamente de los autores, y de los libros que escriben, en vez de leerlos" (R. Chirbes).
Y, en consecuencia, cuantas veces se dicen pestes de ellos, sin tomarse la más mínima molestia en leerlos.
También debo dar la razón a Chirbes en esto:
"Y es en la densidad de su textura (se refiere al libro, dixit Blas), en esa imposibilidad que tiene de ser resumido (aquello que hacían los del Reader's Digest), en lo que un texto alcanza su razón de ser, su carácter de intransferible porción de aura".
Mientras me esforzaba vanamente en recensionar -resumir- su ensayo,
desnudar-las-palabras-del-poder.html , me rondó por la cabeza la sensación de que estaba traicionando justo esa "porción de aura". Confieso que sentí ganas de escribir otro libro con la luz que me proporcionaban todas las reflexiones de Chirbes, fruto de sus lecturas y oficio ("Leer y escribir"). Por suerte para mis improbables lectores, esa tarde de Semana Santa mis obligaciones familiares me impedían tal propósito. Por hazaña tengo, el que redactara la reseña mientras mi hija sufría arrebatos de diva ante la concurrencia de sus primos y primas.
Por razones de espacio, evidentemente, tuve que prescindir de interesantes capítulos. Uno de ellos, principal, estaba dedicado a la "novela de guerra". Lo descarté porque en su mayor parte refería literatura extranjera, a diferencia de los otros clásicos que han conformado el gusto de Chirbes: La Celestina, Cervantes, Galdós. Lo sentí, porque de cualquier manera reforzaba machaconamente las mismas tesis del libro con ejemplos aún más vivos y trágicos, si cabe, correspondientes a las "explosiones" bélicas del pasado siglo. Con vuestro permiso restauro aquí esa parte:
La nueva manera de ver la guerra en la novela del siglo XX tiene mucho que ver con la expresión del argot de la soldadesca, un nuevo lenguaje que desnuda paródicamente los valores militares. Chirbes lo emparenta conVillon, Rabelais, y por supuesto, con la picaresca española: el soldado de Hasek con Sancho Panza según confesión de su autor, pero también con ese pesimismo radical de Lázaro de Tormes.
Barbusse les llama
"les proletaires des batailles", un apelativo que sus censores tachaban. El mejor Sender de
Imán denuncia el deber cívico de morir que se les impone por el derecho de unos pocos (p. 75). En
el episodio nacional
Aita Tettauen (1905), Galdós escribe: "El lenguaje es el gran encubridor de las corruptelas del sentido moral, que desvía a la humanidad de sus
verdaderos fines".
La belleza de los versos de Homero nos ofrece la narración de los vencedores, aunque los filólogos -nos dice Chirbes- llevan dos mil años sin darle mayor importancia. Hasta el cínico Bardamu de Céline siente la necesidad de contar la narración de los jornaleros de la guerra, puesto que "el olvido es siempre la verdadera gran derrota: la que convertirá su sangriento degüello en cumplimiento del deber y la cruel estupidez de los oficiales en caballerosidad" (p.84).
En la página de Kaos he recibido una felicitación o brindis de un tal Gramsciez, apellido que me resulta muy familiar:
ResponderEliminar#1.- Un Saludo
GRAMSCIEZ|24-04-2010 10:54
para Blas y bien, por Chirbes y tú
(http://www.kaosenlared.net/noticia/desnudar-palabras-poder-resena-cuenta-propia-leer-escribir-r-chirbes)
El olvido es siempre la verdadera gran derrota...que grande era Celine ,Blas. Hace años disfute de la lectura de sus escritos, y ahí quedó grabado. Mi memoria no es como la tuya, que más quisiera yo, pero reconozco el valor terapeútico de tus escritos en este pobre y fatigado lector. Y Chirbes a quien mi ignorancia y mi poca curiosidad habían condenado a la ignorancia, se convierte en un icono, y un tipo al que estaría encantando de invitar a cenar sin limite de gasto.
ResponderEliminarMaestro, ante vos me humillo, ante el cielo solo desprecio.
Un abrazo.
Antonio Ortiz
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarUn libro hay que leerlo de principio a fin, porque como dice Chirbes "... en esa imposibilidad que tiene de ser resumido , en lo que un texto alcanza su razón de ser, su carácter de intransferible porción de aura".
ResponderEliminarGaldós, Cervantes, Céline, Homero, Villon, Rabelais, la picaresca, ... permanecen en la memoria del mejor lector, olvidar sus escritos, su obra sería caer en la derrota mas absoluta. Gracias por este recordatorio Don Blas!.