Como mucho se admiten gases naturales, bien merecidos para aquellos que gustan de chupar rueda:
En Donostia es conocido el francés Irwin por su pulso nudista fuera de la Concha, con bici o sin ella. Le llueven los procesos por lo que al menos ha de ir pensando en cubrirse, bien sea con un chubasquero de algún arrantzale (marino) del puerto. Primero he hallado éste ://www.diariovasco.com/20081007/al-dia-local/juzgan-ciclista-frances-pasea-20081007.html
en que fue absuelto: se cumplió la preciada máxima del derecho que dice que lo que no está prohíbido, está permitido. Debieron juzgar entonces al ertzaina que lo detuvo. Recientemente lo han juzgado por exhibicionismo y desobediencia. En alguno de los medios, que recogen la noticia con mucha menos simpatía, he podido ller lo siguiente:
"El texto de la Fiscalía explica asimismo que un hombre que pasaba por el lugar "se vio obligado a tapar los ojos a su hijo de diez meses para que no presenciara el acto de exhibición del acusado". (En negrita en el original). Yo no salgo de mi asombro. ¿Y ustedes?
A mí me parece mucho más razonable el vídeo en el que razona su conducta : puede verse en el margen derecho de la misma noticia.
Ya ven, un seguidor de Jesucristo y de Milgram, un sociólogo muy interesante en particular por sus experimentos sobre la obediencia a la autoridad en la California de los 70.
Me da que habrá que volver sobre el personaje, Milgran y el proceso o procesos pendientes.
Uno de los primeros organizadores de este natural paseo, era un maño, excelente compañero de curro que anda dando guerra ahora por Castilla La Mancha.
ResponderEliminarMe río pensando que se le pasa a un argentino por la cabeza cuando lee esta frase:
"En Donostia es conocido el francés Irwin por su pulso nudista fuera de la Concha, con bici o sin ella"
Ya sabes tonterías mías.
Un abrazo.
Por cierto que este fin de semana estuve por Navaluenga
Claro, dentro de la Concha se nota menos...
ResponderEliminarAunque no reparé demasiado al escribirlo: era tarde para miramientos, sí que me debía acordar de los argentinos pasando entre alfileres. De haberlo publicado en Rebelión donde nos lee bastante gente de Sudamérica te aseguro que me hubiera cortado, más si no conocen esa Concha tan bella.