
Alfonso Ussía, aún es dado a ellos y ha compuesto para ocasión tan esperada estos ripios:
http://www.wikio.es/news/Alfonso+UssÃa
He de confesar casi con estupor que el personaje romanceado se presta a ello, y más a su pesar
que como héroe de villano protagonista de esas estampas denigratorias.
Por venirle al pelo a don Baltasar Garzón Real, hasta le cuadran perfectamente su nombre y apellidos. Tiene nombre de rey mago sin magia, apellido de hombre de gesta y ese Real, si no de

Pero que nadie se confunda, no irá este ujier a seguir los pasos del señor Ussía, "a la orden de usía, mi coronel", con lo cual le invito por turno a que con mis patronímicos sea tan ocurrente, como que me mande a tomar por la calle de enfrente, hombre tan exigente con los versos como con las damas y señoras varonil.
Habrá que empezar el affaire Garzón, aunque con brevedad casi por el principio para explicar su conocida trayectoria sin caer en esos vicios tan españoles, a la sazón, señalados incluso desde fuera. Por ello conviene adelantar que no comparto su procesamiento. Con esta casta togada desde luego ofrecemos un retrato internacional, aquí a diferencia de la figura de Garzón, bastante plano: esos señores, como lo es el PP, apestan a franquismo por todos sus poros.
Lo único que bendice el señor Usía del magistrado es su lucha contra ETA: "Recuerdo que contra ETA/ Garzón ha sido un valiente./ Contra el terror y su entorno". Pues bien, mucho antes de esa contaminante Ley de Partidos que propicia monstruos jurídicos tan controvertidos como la teoría aplicada del entorno; debería recordarse la unanimidad mediática con que se aplaudían y se aplauden sus audacias en esa otra causa general (después de la abierta finalizada la guerra por el franquismo para la represión de la masonería y el comunismo) contra los vascos. Ahí tienen de actualidad la declinación acusatoria de la Fiscalía en el caso Egunkaria.

Como la sección de la Audiencia Nacional que revisaba sus autos no dejaba en pie ni medio, conviene igualmente recordar que pro nova communis causa también se entruyó a sus tres magistrados, por prevaricación y cohecho, sin que nadie entonces moviera ni un peine. Aunque se descubrió la artera maniobra y se falló su inocencia, los tres magistrados removidos no volvieron a su antiguo puesto y don Baltasar, encumbrado por tirios y troyanos, halló banda ancha con su deslavazada prosa para perpetrar su justicia. Porque nadie se engañe, es un secreto que ya no interesa mantener a todos, su pésima y bien ganada fama de mal instructor entre su gremio. Este campeón de los derechos y libertades ha dado conferencias contra la tortura desoyendo cuánto le llegaba de los sótanos de sus mismas dependencias, ha decretado prisiones a troche y moche con la misma facilidad que pasado un tiempo las levantaba. Ha protagonizado telediarios con redadas que pasado el efecto de la noticia se han quedao en nada. Garzón en tantas diligencias y sumarios ha sido espuma, espuma de mucha coca y cola, de champagne, de contubernios, de orgías y toda clase de saraos, ¡un bluff! Y sin embargo, debido a esa casta judicial filofranquista y conservadora, su acción más en la línea de los fiscales de los demás países modernos, nos ha devuelto proyectado el anquilosamiento de sus más altos colegas. Lo de Pinochet (Vide nota bene in fine), no sirvió para nada, pero ahí queda; lo mismo hubiéramos podido decir de lo de Franco, más en algo ha sido coherente y demostrado mayor justicia. En resumen, Garzón, un tonto útil durante todos estos años. Un juguete roto de provecho mutuo hasta meter su trompa de elefante en la cacharrería de Gürtel y en la sacristía de los Principios Fundamentales que sus señorías del Supremo juraron.
Deseo a su defensa letrada fortuna. Nacho Escolar la ha difundido aquí:
http://http//www.estrelladigital.es/ED/diario/312463.asp
Y poco más que añadir, además de merecer romances, sobre Garzón se escriben ríos de tinta y se han escrito libros, unos a favor, otros en contra*. No le darán el Nobel, no señor, pero no cabe duda de que pasará a la Historia como también quiere. Reune el personaje todos los ingredientes para que así sea.
---Para la banda sonora. Veo que Otoski, mi abnegado colaborador, incluye abajo unas rimas del Sabina. ¿Que te parecen estas otras que adaptó de Brassens? Hablan de la violación de un juez por un gorila el mismo día en que había dictado una sentencia de muerte...
http://www.blogger.com/http://www.cancioneros.com/nc/2474/0/el-gorila-georges-brassens-joaquin-carbonell-joaquin-sabina/
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Bibliografía.-
A favor:
El hombre que veía amanecer. Título cursilón de la pérfida opusiana Pilar Urbano.
No a favor:
Garzón, la ambición de un juez. Miguel Ángel de la Cruz. Traza una documentada biografía, cuyo resumen enlazo: http://http//diario.elmercurio.cl/detalle/index.asp?id=%7Bd76917ac-2b95-4189-91aa-22a90a0b39de%7D
En contra:
Garzón, la otra cara. El periodista Pepe Rei pasó por la cárcel a su disposición poco después.
Desde el banquillo. De su ex-colega y ex-amigo Gómez de Riaño. No es propiamente una biografía contra él, pero no negaremos, por decirlo suavemente, que se acuerda mucho de él.
Garzón, juez o parte. José Díaz Herrera.
Tigre de papel de mi amigo Mariano Sánchez Soler, gran conocedor de todos los entresijos del franquismo y de su herencia hasta nuestros días.
NOTA BENE.- En el año 2002 con la ratificación por parte de 60 estados (entre ellos España, no los USA o Israel) del Estatuto de Roma de la Corte penal internacional, él mismo entró en vigor y me tocó impartir un curso a compañeros del Tribunal Supremo y de la Audiencia Nacional. No faltaron las preguntas acerca de la competencia de su juzgado para conocer del caso Pinochet y solicitar su extradicción. La Ley Orgánica del Poder Judicial, aún no reformada, le habilitaba sin lugar a dudas para ejercer la llamada justicia universal. Entiendo, ahora, que sus diligencias previas (que sepa no llegó siquiera a firmar ninguna resolución -justa, ni mucho menos injusta a sabiendas...-), además de procedentes y pertinentes a la instrucción, rompían la impunidad sobre un genocidio mal enterrado con las leyes-amnistía supuestamente vigentes de la transición. En este sentido, era y sigue siendo encomiable la labor, entre otros, del historiador Francisco Espinosa en esa misma causa.